EL ALETEO DE UNA MARIPOSA EN VENEZUELA PUEDE PRODUCIR UN TSUNAMI EN AMÈRICA.

 

SOMOS EL LABORATORIO DE LA APLICACIÒN DE LA TEORÌA DEL CAOS

 




El efecto mariposa

 


Esta teoría es ampliamente conocida, por lo que se viene a denominar el efecto mariposa, según el cual “el débil golpe de las alas de una mariposa puede ser la causa de un huracán a miles de millas de distancia”. Se indica de este modo que la existencia de una variable concreta puede provocar o alterar otras, influyéndose progresivamente hasta obtener un resultado fuera de los esperado.



 

En Venezuela se desató el demonio del caos, desde hace algún tiempo, es de tal magnitud que el “aleteo de la mariposa” está produciendo efectos en todo el continente. La situación de pobreza y de inestabilidad social desbordó las fronteras y está desestabilizando la región. Si no se enfrenta de manera contundente, no solo controlando el flujo migratorio y con las ayudas sociales a la diáspora, sino acabando con la raíz del problema que es el régimen chavista. Si no se toman esas medidas el problema se agravará.

  Hay un aleteo provocador de Maduro y sus militares en la frontera colombiana, cuenta con la presencia del ELN y las FARC, grupos guerrilleros con objetivos muy claros y Venezuela es no solo refugio, sino la principal fuente de financiamiento del narco terrorismo en la región. Solo esta situación debería mover los sistemas de seguridad del continente, pero no ocurre, hay una tácita complicidad de los organismos internacionales, dominados por socialistas.

 Tristemente el aleteo de la mariposa exporta a millones de venezolanos, la mayoría gente honesta, preparada, que puede aportar mucho al desarrollo y al progreso, pero también entre esos millones de venezolanos que salen por las fronteras hay drogas, inseguridad, crimen organizado trasnacional y terrorismo. Es una invasión silenciosa que exige una acción de inteligencia policial para apartar a los indeseables que salen del país a delinquir y generar patrones de rechazo a las mayorías de venezolanos honestos que solamente buscan obtener unos ingresos que les permitan vivir decentemente, aspiración normal que en Venezuela bajo el socialismo es imposible.



 

 ¿Cómo funciona el caos programado en Venezuela?

 

El ciudadano de a pie vive sometido a un perverso sistema de disfuncionalidad, con el único fin de mantenerlo ocupado y sometido a un estrés que no le permite pensar con racionalidad.

El venezolano mayor que madruga y a veces duerme a la puerta de un banco para cobrar una miserable pensión o unos bonos de hambre, no puede pensar en otra cosa que no sea cómo resolver el problema diario del qué comer. El caos le permite mantener a miles de personas jóvenes, en edad productiva vestidos de rojo, con su caporal al mando, limpiando autopistas y avenidas por salarios miserables en nombre de una revolución que eliminó la máquina, e impuso la mano de obra esclava, pues le sale más barata al contratista enchufado, que cobra en dólares y paga en bolívares devaluados.

Ningún trabajador, ni jubilado de la administración pública venezolana puede cobrar su pensión en dólares, aunque sean cinco dólares mensuales.  Al cambio de hoy no llega a un dólar de ingreso mensual, es imposible vivir con esos ingresos, allí está una de las razones del caos colectivo. Pero al contrario los enchufados, los contratistas, los militares de alta graduación, los altos funcionarios del régimen todo lo cobran en dólares, compran todo lo importado en sus bodegones en billetes verdes. Una minoría entre la minoría viven como jeques y el 95% de los venezolanos literalmente se mueren de hambre. Pero ese caos es programado desde el poder y han hecho de Venezuela el reino de la inequidad y la más abominable injusticia, ese caos es uno de los factores que les permite mantenerse en el poder.

Venezuela es el único país del mundo donde la gasolina era gratis y de repente se dolarizó y pasó a ser la gasolina más cara del mundo. Otra contribución al caos, lo cual no es producto de un accidente o de malos administradores, NO, es un plan para obligar al venezolano a convivir con la locura y el absurdo. Vivir en una nación disfuncional, donde el control social y político se ejerce administrando el hambre, dando de comer mediante paquetes de alimentos subsidiados. Quien no recibe ese paquete no puede comer.

La teoría del caos permite modelar y explicar el cambio que atravesamos, en particular los cambios abruptos en las políticas públicas, al permitir  la disfuncionalidad  de la libre circulación de dos monedas,  Es un mundo paralelo donde funcionan dos Asambleas, dos presidentes, dos constituciones , dos ejércitos, un poder central  bicéfalo con dos rostros Maduro y Diosdado, tenemos dos TSJ , varias oposiciones Estas discontinuidades fomentan el caos, el cual se apodera de la mente de los ciudadanos, de las instituciones, de la sociedad.

No tenemos como sociedad un contrato social, la Constitución es violada continuamente, solo es un librito en el olvido, la verdadera constitución es un adefesio jurídico creado en los laboratorios cubanos llamado el Plan de la Patria. Esa es la hoja de ruta del caos planificado.

 Cuenta mucho simplificar toda una telaraña de incongruencias, de locuras, de estupideces planificadas, que solo sirven para que el venezolano haga chistes y se olvide del poder. El caos ha convertido al país en uno de los Estados más míseros desde el punto ético y moral, en el cual la corrupción ha sido la bisagra entre la impunidad y la complicidad. Podemos afirmar que este perverso plan tiene como finalidad borrar de la mente el sentido de la venezolanidad, el orgullo de la nacionalidad y hacer del venezolano un ente manejable, castrado y entregado a la desesperanza que huye por las fronteras.

 

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