DIME QUIÈN ES TU TESTAFERRO Y TE DIRÈ
QUIEN ERES.
La profesión más lucrativa del mundo, tiene su
universidad, sus posgrados y maestrías en Venezuela.
Hasta el más humilde alcalde(a) tiene su
testaferro. Un potentado dueño de medio pueblo, de usurpaciones de bienes públicos
y de contratos amañados.
Entre el ayer y el hoy la diferencia son los
actores y el volumen del robo.
El término testaferro
hace referencia a una persona que se responsabiliza o asume la titularidad de
un contrato o negocio que le corresponde a otra persona.
Por consiguiente, el testaferro presta su identidad,
proporcionando su nombre, cuentas bancarias u otras posesiones para encubrir a
otro sujeto. A este individuo se le suele conocer también por el nombre de
hombre de paja.
¿Dónde
están los gobernantes más corruptos del orbe?
La
palabra “corrupción” etimológicamente viene del latín corruptus, que
significa descomposición, podredumbre.
- La
corrupción constituye el más peligroso virus de los sistemas de gobierno, que
afecta la legitimidad de la política y arrasa la confianza ciudadana en las
instituciones.
Como sociedad estamos llamados a reconocer que
todo acto corrupto vulnera los derechos de los individuos y de la sociedad. No
es una conducta aislada, individual y abstracta que se llega a tolerar como
algo normal e inevitable, casi se hace costumbre y hasta una cultura que nos viene
desde el momento mismo de la conquista y colonización. Nos llegó la corrupción
en las naves de Colón. Como el virus, es un mal importado que llegó para
quedarse y parece que la manada se contagió.
Pero hay
secuelas del virus de la corrupción en nuestra sociedad, el corrupto va dejando
víctimas a su paso e imposibilita al Estado para que cumpla sus funciones a
cabalidad. Al contratar una obra se cumple el rito secreto de la comisión para quienes
tienen el poder discrecional de otorgar el contrato, no les importa que exista una
contraloría y normas escrupulosas, según las cuales deben garantizar transparencia.
El concierto entre funcionarios y contratistas está siempre blindado para
defraudar el presupuesto de una obra pública o un servicio. Hay casos de corrupción
total donde la obra no se construye o se hace tan mal que se derrumba. Esto ,en
ambos casos no solo implica una afrenta al orden jurídico, sino un daño directo
a las comunidades, una profunda lesión a la moral administrativa y la destrucción
de la ética pública.
LA CORRUPCIÒN ES UN ATENTADO CONTRA LOS
DERECHOS HUMANOS.
En el caso venezolano la corrupción se convirtió
en tsunami que acabó con la prosperidad de una nación petrolera. La llegada de Chávez
al poder convirtió la corrupción en una pandemia nacional con crecimiento
exponencial, no significa esta afirmación que durante el período democrático no
hubiese corrupción, solo que con Chávez se socializó y con Maduro se hizo pública
y descarada. Pruebas hay que es régimen cleptocrático, el cual vive de la corrupción
en todas las modalidades existentes y solo encuentra su razón de ser en un
estado putrefacto donde la corrupción no tiene límites, se dolarizó y permeó a
toda la sociedad.
Mientras
el pueblo carece de luz porque se robaron el dinero para el mantenimiento del
sistema eléctrico, lo mismo ocurre con el agua, con el gas, con el transporte público,
con todos los servicios que corresponden al Estado como la salud, la educación y
la seguridad. Nada funciona porque todos esos presupuestos han sido robados con
descaro. Cada alto funcionario, civil o militar tiene su pirámide de corrupción,
desde los operarios que recogen el dinero al estilo de las mafias, hasta llegar
al entramado de los lavadores de dinero de origen corrupto como Alex Saab que
adquieren propiedad multimillonarias a lo largo y ancho del mundo, que lavan
miles de millones de dólares en paraísos fiscales y actúan como testaferros de
los amos saqueadores de la república. Cada funcionario tiene a su disposición su
estamento exclusivo de corrupción desde la comisión, pasando por la perisología,
el oro, el petróleo, los alimentos, los seguros. Las llamadas “matracas alcabaleras”
hasta el control de las rutas del narcotráfico. Todo tiene en precio, nada se
puede hacer sin corrupción, eso es Venezuela hoy una letrina inmunda, donde
desde el presidente de la república los altos jueces del TSJ, los ministros y
funcionarios tienen orden de captura y pago de recompensas por sus acciones
delincuenciales. Los dos hijos de la
pareja presidencial pagan condena en EE. UU por tráfico de drogas. El hijo del
presidente que llaman el heredero del trono, tiene su propia organización de
negociados a la sombra del poder presidencial, con sus testaferros. Las hijas del
difunto Chávez viven en las ciudades más caras del mundo, en apartamentos que
valen miles de millones y llevan una vida de jet set todo generado por la corrupción.
Esto es solo la punta del iceberg de la gran corrupción nacional. Mientras el pueblo padece de la más abyecta miseria.
Erradicar la corrupción en Venezuela requiere
de una acción profiláctica profunda, liderazgo con principios éticos, con
valores morales, pero muchos factores opositores también están contagiados por
el virus, son sobornables a cambio de futilezas Es un mal que necesita una cirugía,
pero ¿Dónde está el cirujano? Tal vez una dama, las mujeres venezolanas han
demostrado que no son tan corruptas. Hay reservas éticas para construir un
nuevo país.
No es fácil
en una sociedad en decadencia y podredumbre hablar de erradicar la corrupción al
100%, eso significa cambiar toda una manera de pensar del colectivo. Pero urge
un cambio de gobierno y que lleguen nuevos protagonistas y que la sociedad
civil no sea tan tolerante, que se controle a los funcionarios.
Necesitamos
colocar las nuevas tecnologías al servicio de la lucha por la probidad pública.
Esquemas informatizados de atención y plataformas de control, lo mismo que la
operación efectiva del gobierno abierto y en línea, son esenciales. Nada de lo
público debe ser reservado, ni sustraído del escrutinio público, desde las
audiencias, hasta las agendas. Las facilidades tecnológicas deben permitir al
ciudadano reportar y denunciar actos que puedan ser violatorios de la ley.
Las licitaciones deben estar montadas en línea y cualquier ciudadano puede
hacer contraloría con el internet. Pero requiere una sociedad responsable que
asuma su papel contralor y la apertura de los canales de denuncia. En Venezuela estos métodos jamás llegarán
mientras estén el poder los campeones mundiales de la corrupción.
Comentarios
Publicar un comentario