Dònde està el "Bravo pueblo que el yugo lanzò"


VENEZUELA HOY ES UN BIOTERIO
 (UN BIOTERIO ES UN ESPACIO PARA EXPERIMENTAR CON SERES VIVOS.)



Controla le mente y la voluntad de un pueblo. Y aquello de el “Bravo pueblo que el yugo lanzó” y “El gritemos con brío, muera la opresión”, solo queda como un canturreo, un himno vacío, para el recuerdo de épocas gloriosas, un sin sentido, ahora el bravo pueblo está domesticado, dominado y la opresión y el despotismo triunfan de nuevo” esa es la verdad, aunque duela. 20 años de experimentación cubana, hoy dan sus resultados.

Había un país tropical, hermoso, de gente sencilla, amable, trabajadores y amplios en sus maneras, donde cualquier sin ser de allí, jamás se sentía extraño. Su grave problema era depender de un solo producto, el petróleo, cuyo único dueño era el Estado, quien se hacía con el poder del gobierno, se adueñaba del Estado y de única riqueza, que permitió que se convirtiera en un BIOTERIO PERFECTO, donde se hacen, aún en contra de sus habitantes, los más crueles experimentos sociales, políticos y psicológicos. Se mide, especialmente, la capacidad de resistir el mal sin una reacción coherente, organizada y contundente. Para ellos los venezolanos somos apenas unos mamíferos euterios de un laboratorio de un millón de Km2, sometidos a los experimentos socio-políticos por parte de unos “científicos perversos”, empeñados en conducir al mundo en contra de la lógica de la historia y de la evolución social natural y normal. Eso son los comunistas.

 Se empeñan en probar en los  venezolanos,  que todos los humanos son  manejable y dóciles, que todas las experiencias fracasadas del colectivismo mundial, aquí pueden ser exitosas porque la cultura petrolera y minera ha mutado en  nosotros dándonos una resistencia única para soportar todo tipo de carencias, vejaciones y robos, como  pasar hambre, adaptarse a los ambientes más contaminados y pestilentes, soportar las más aberrantes humillaciones, ser esquilmados colectivamente por los Guardias Nacionales y aceptarlo tranquilamente. Un condicionamiento para   mantener el espíritu incólume frente a la adversidad.  Aguantar todo.

 Según su perversa teoría de Venezuela debería salir el nuevo hombre, el prototipo de la nueva sociedad propuesta por el neo. comunismo, el perfecto hormiguero del siglo XXI, cada quien cumple su función colectivista, sin que intervenga el egoísmo, la competencia natural, el espíritu de superación la competitividad, el espíritu del emprendedor. Todos iguales con unos ingresos miserables, una cajita de comida, se acabó la clase media y con ello la parrillita sabatina, la cervecita, el paseíto a la playa, el carrito usado.  Ahora somos una sociedad donde no importa de falta agua se compra un camión tanque dolarizado, no hay luz se compra una planta eléctrica, no hay gas se cocina con leña. No hay gasolina se paga en dólares, nada conmueve las bases éticas de la sociedad. Ellos confirman que la paz y la felicidad no es producto de disfrutar de la calidad de vida, ni de los ingresos, ni de la iniciativa, mucho menos de la racionalidad entre gobernantes y gobernados, para nada importa el equilibrio  en la convivencia ciudadana,  el Estado impone su hegemonía, su modelo  y todos aceptamos  felices, en una actitud psicológica aprendida que predispone al individuo a soportar por entrenamiento sobrehumano todas peores adversidades que esperan al hombre del futuro.

Los neo comunistas han encontrado el bioterio perfecto que reproduce a la sociedad
 para ellos bella, la utopía hecha realidad.

El sueño del nuevo hombre de Marx, que se entrega sin restricciones, ni protestas, ni condicionamiento al poder absoluto el gran "padre" representado por un Estado y controlado por una minoría de elegidos que solamente tienen el trabajo de pensar por 30 millones de ex-personas.
 Eso es un Estado comunista y hay que tomar conciencia que tú, ni yo somos ratones de laboratorio, somos seres humanos. Hijos de Dios y no de Chávez.

 El COVID_19 llegó en el momento más oportuno para consolidar la sociedad de los eunucos, de los descerebrados, de los conformistas, de los colaboracionistas. Un venezolano promedio solo preocupado por el día a día, sin esperanzas, sin proyectos y lo peor sin voluntad, sometido a la perversidad de un régimen de delincuentes.  Un régimen que usa el miedo, el hambre y la desesperanza como instrumentos de control social, Esta es la sociedad perfecta para los comunistas. Tener un arreo, unos fuetes y un poder hegemónico haciendo lo que le viene en ganas, especialmente enriqueciendo, con una minoría que controla el gran laboratorio nacional. Estar preparados con armas para gobernar eternamente, aunque ese pueblo se muera de hambre, al final son simples costos y daños colaterales de una revolución-.

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