“GOYO”
CASTRO.
De los Castro de la Vega, su padre Don Juan fábrica el mejor
chorizo de cochino que vendía en Cùa. Goyo toda su vida fue un personaje
simpático, gran trabajador, su gran amistad con con Cocò Santaella (Q.E.P.D.)
los llevó a crear un original negocio de comida rápida que llamaban el “COGOYO”
que unìa en una sola palabra los dos nombres de los emprendedores. “Goyo” aficionado al beisbol, a la música tropical,
especialmente la nostalgia de los grandes boleros, de las viejas rancheras,
pasillos y joropos.
Un día tomó la decisión
de convertirse en la referencia de esa música de ayer y en una clásica esquina
de la plaza Zamora tenía su discoteca del recuerdo. Quien quería un desaparecido
L.P. convertido en C.D de Julio Jaramillo, de Daniel Santos, de Carmen Delia
Dipinì o de Toña la Negra, solo tenía que llegar a la esquina de la nostalgia y
solicitarse a Goyo, Seguro que lo tenía o toma nota y lo llevaba al formato
C.D. tenía clientela de Caracas y era una referencia para los coleccionistas de
música.
Goyo se nos fue y la nostalgia
perdió su esquina. pero quedó su grato recuerdo de un personaje muy especial de
la cueñidad, un buen ciudadano, respetuoso, sencillo y gran trabajador. Un
recuerdo lleno de gran cariño.
Que en paz descanse.
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