(SE BUSCAN).
En las viejas películas del viejo Oeste,
las famosas vaqueras siempre había un requerimiento de justicia contra los “malos”,
los delincuentes. Le ponían precio a su cabeza, en un cartel impreso con el
agregado “Vivo o muerto”. El precio de la cabeza era de acuerdo a los daños,
robos y crímenes cometidos. Era un llamado público para que inmediato aparecieran
aquellos tenebrosos personajes: Los CAZA REACOMPENSAS, uno jinetes mal encarados,
expertos en el manejo de las armas, casi siempre vestidos con un, sobre todo,
una especie de bata larga que tenían que colocar hacia atrás para poder sacar
el revólver y disparar en menos de la espabilada de un loco.
Ese era en parte el argumento
de esas películas, la lucha del bien contra el mal y el “sagrado” derecho del
ciudadano norteamericano a usar armas para defenderse y de contratar de hecho, vía
WANTED a expertos que hicieran del trabajo de la captura de los delincuentes,
enemigos de la sociedad.
La historia ahora no es una vieja película de John
Wayne, es lo mismo que ocurría en historias del siglo XIX, llevadas al cine,
pero en este caso los “malos de la película” son los altos funcionarios de un
gobierno latinoamericano. Una organizada banda(presuntamente) encabezada por el mismo
presidente de esa república. El
anuncio del fiscal General norteamericano, William Barr, de recompensas
millonarias por apresar a una serie de los más altos personeros venezolanos y
al propio Nicolás Maduro, acusados de narcoterrorismo Textualmente la acusación es por “haber
participado en una asociación criminal que involucra a una organización
terrorista extremadamente violenta, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia (FARC), en un esfuerzo por inundar Estados Unidos de cocaína”. La
mayor recompensa es de hasta 15 millones de dólares por información que lleve
al arresto de Nicolás Maduro y sus compinches.
La decisión judicial viene amparada por una larga lista de presuntos
delitos fechados a partir de 2016, cada uno con sus cifras y señales. Para las
personas acusadas será –o sería – muy cuesta arriba refutar la acusación que,
puesta en la forma casi global como la presenta el Fiscal General de los EEUU,
será de muy difícil tarea para la defensa ante un tribunal y un jurado. En la
lista de los acusados figuran además de Nicolás Maduro, la plana mayor de los
más allegados a él, de manera que el golpe que se les asesta es duro. Colateralmente es una jugada de triple banda contra los "meseros", "dialogueros" y anexos, contra la Uniòn Europea, Noruega, la ONU. Claramente con WANTED no se puede dialogar, se les captura o eres còmplice.
Còmo se puede ir a unas elecciones manejadas por unos solicitados, candidatos buscados.
Ya se empieza a mencionar que hay
muchas coincidencias, analogías con el caso del panameño Noriega que fue sacado
por la DEA y presentado en los Tribunales del Norte en una operación que todos
recordamos.
Esta película está más
interesante porque la realidad está superando a la ficción.
Comentarios
Publicar un comentario