Maduro
vive su peor momento, pero la oposición no esta bien.
Por ahora solo un hecho fortuito, un acontecimiento muy sobrevenido puede cambiar la ruta de la entronización definitiva de la dictadura a pesar de tener todo en contra y de vivir su peor momento.
El
chavismo con Maduro a la cabeza vive su peor momento, ya el carisma de Chávez no funciona como paliativo y
atenuante de errores, cinco años es mucho tiempo y el cúmulo
de traspiés y pifias es una presa rota que
se lleva a su paso a toda la nación . Maduro
no ha sido capaz de crear un movimiento político propio sus muletas están en la
tumba de la montaña mágica y su gestión frente
a la Presidencia no resuelve los graves problemas que padece Venezuela, los cuales se agudizan día a día, por
la incompetencia y pésimo manejo.
La pregunta es
qué razones tiene el chavismo para buscar la reelección de Maduro, quien
solo tiene como credenciales para la campaña electoral la destrucción total de la Republica, la peor catástrofe
de la historia de Venezuela. La respuesta es que aun siendo el peor candidato no tienen otro, ni otra. Prefieren los
factores del chavismo cargar con ese cadáver
y embalsamarlo en una coalición coyuntural, crean un movimiento que
llaman Somos Venezuela, solo con fines electorales. Apuestan todo al estado catatónico
de la oposición. Quien también vive su peor momento. Dividida, con una gran pérdida
en su credibilidad y confianza, sin la posibilidad de poder articular una
estrategia que mueva a la oposición en la dirección correcta con la velocidad
en que se presentan los acontecimientos.
La MUD ha sido neutralizada y con una feroz
campaña del régimen por las redes se le ha hecho responsable de todos los males.
Invisibilizada, con sus principales líderes inhabilitados o en el exilio, con
los principales partidos opositores ilegalizados. La convocatoria a unas
elecciones fuera del cronograma constitucional, convocada por una ANC que
carece de legitimidad, hace imposible asistir a ese proceso sin convertirse en
delincuentes electorales y colaboracionistas de la dictadura. Pero el régimen en
su estrategia de dividir empaqueta la elección presidencial con las de las
Asambleas regionales o Consejos Legislativos y los Concejos Municipales con el único
fin de dividir de obligar a una participación del liderazgo regional y local. Dividen
para vencer con gran facilidad. Pues un 80% de los electores opositores no están
dispuestos a participar en la farsa y no hay quien tenga el poder de hacer
cambiar esa posición. El candidato extra- partido no ve condiciones para lanzar
su candidatura, quizás era el único que podía mover el entusiasmo de los
electores y los partidos no tienen como.
Las elecciones carecen de las condiciones mínimas
aceptables, el mundo entero y los Organismos Internacionales consideran los comicios como un Show
fraudulento entre chavistas, una especie
de convención del chavismo para atornillar
el sistema por seis años más, Aunque en la práctica solo agrava la situación económica
y social que ya se hace insoportable, no solo para los venezolanos sino para
toda la región.
El manejo de unas elecciones fraudulentas implicará mayor aislamiento internacional,
pero el gobierno está claramente dispuesto a incurrir en ese costo si eso significa
mantenerse en el poder. No está claro si el aislamiento es suficiente para
salir de esta dictadura. Solo la articulación de un movimiento opositor
coherente, claro y en unidad puede hacer efectiva el aislamiento y las sanciones para salir de la dictadura del chavismo a corto o mediano plazo.
Por ahora solo un hecho
fortuito, un acontecimiento muy sobrevenido puede cambiar la ruta de la entronización
definitiva de la dictadura a pesar de tener todo en contra y de vivir su peor
momento.
Comentarios
Publicar un comentario