Cuando las elecciones son una mentira..


                                  VOTAR EN DICIEMBRE

Si las elecciones de diciembre del 2020 representaran la posibilidad de un cambio, simplemente la A.N.C. y el Tribunal Supremo no las permitirían. 
Cuando la elección  no garantiza alternabilidad es una farsa.
Las elecciones presidenciales del año 1998, no fue una elección más, una combinación entre el rechazo a los políticos y la abstención, abrió  el rumbo y el funesto futuro de Venezuela. Se hizo gobierno una visión primitiva y simplista que potencia al Estado sobre el ciudadano, una equivocación que llama socialismo del siglo XXI que nos trajo la hipérbole de todos los males y la ausencia del bienestar y del progreso. Se impuso el personalismo mesiánico sobre los conceptos civilizados e institucionales que rigen  a las naciones modernas y desarrolladas del mundo.
Se aprobó  en 1999 una nueva Constitución, cuya finalidad era demoler el sistema democrático; la Constitución de la República Bolivariana  se convirtió  en un librito chiquito y azul, un elemento distractor, un capote que oculta  en un mundo paralelo, la verdadera constitución  comunista llamada el “Plan de la Patria” que ha llevado a Venezuela su situación actual de pobreza colectiva, de escasez, crisis humanitaria de hambruna y muerte por falta de medicinas.

 El mundo paralelo inventado por el chavismo se inició con dos Constituciones, una formal contenida en un librito azul y una real y fáctica aplicada gradualmente, impuesta con la tolerancia de la sociedad. No hay un solo artículo de la Constitución vigente que hable de socialismo como sistema para la vida del venezolano, pero la realidad impuesta no difiere de lo ocurrido en Cuba en 1959. La diferencia es de estrategia,  Fidel impuso en comunismo en 6 meses, con relación a  los cubanos opositores, unos salieron al exilio, otros fueron detenidos y miles fusilados, todos acusados de traición al patria y de gusanos contra-revolucionarios. En Venezuela se ha hecho lo mismo, con mayor sutileza, en 18 años casi 4 millones de venezolanos fueron aventados al mundo, varios cientos están presos, en las mismas condiciones que estaban los cubanos, sin derechos, ni garantías y millones de venezolanos  no son llevados al paredón de fusilamiento pero son exterminados por el hampa, la desnutrición, las enfermedades crónicas sin tratamiento, con una infección o un accidente por ausencia de insumos médicos tan elementales como un antibiótico o una aspirina.
Humillarse ante la ANC,.No hay espacios ante un régimen totalitario


En el juego de perversión se permiten elecciones, incluso se dan el lujo de perder en algunas ocasiones Gobernaciones, Alcaldías y hasta el Poder Legislativo, pero el Plan de la Patria en su mundo paralelo tiene la solución :Crear Gobernaciones, Alcaldías e incluso una Asamblea Nacional paralela que ejerza las funciones de contratación y ejecución presupuestaria quedando los entes públicos en manos de la oposición como simples paga nominas sin recursos para cubrir los aumentos salariales decretados. Todo este abuso legal ha sido tolerado con el falaz argumento de no perder espacios. Hay algunas Alcaldías, como las del Este caraqueño que son el único enclave de poder de la oposición porque tienen autonomía presupuestaria por sus impuestos locales, con esa excepción a la regla, todos los demás espacios democráticos no existen aunque se tengan gobernaciones como el Táchira, Mérida, Anzoátegui y Nueva Esparta. Esas gobernaciones son “bozales de arepas” para poner a comer algunos burócratas opositores necesitados, para oxigenar una oposición dispuesta a inclinarse y reconocer a la espuria ANC y para dar ante el mundo una apariencia de democracia y de legitimidad. Un parapeto que racionalmente no se puede tragar.
 En viaje sin regreso por la autopista del socialismo del siglo XXI  lo iniciamos en 1998, poco a poco el ensayo comunitario ha impuesto sus prácticas de gobierno mafioso, de un modelo fracasado para el progreso y la prosperidad pero exitoso en imponerse y mantenerse por el miedo, el hambre, la pobreza, la represión y la muerte. El mundo paralelo ha impuesto su plan.
 Apostar al futuro significa salir de este régimen y obliga a tomar el toro por los cachos, no hay espacios democráticos, no hay manera de coexistencia entre una dictadura comunista  y la libertad, hay que romper el con el mundo paralelo inventado por el socialismo para dominar, tenemos que entender esa verdad, la última creación paralela es la seudo moneda llamada “petro”, cuya finalidad en inventar un mundo financiero paralelo, un presunto  capitalismo corrupto  donde los controles mundiales no puedan llegar y así mantener sus altos niveles de corrupción
La verdadera Constitución de Venezuela es el Plan de la Patria.

 La crisis solo tiene una salida, la cual no es otra que un nuevo gobierno. Ir hoy a elecciones manejadas por el régimen, es comerse unos  caramelos de cianuro, muerte dulce pero segura. Elecciones SI, pero en condiciones totalmente diferentes a las actuales. Participar en las elecciones  bajo las fórmulas de fraude continuado y abuso corrupto es legitimar a un régimen que está agonizando y cercado.








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