EL MAGISTERIO NO ES UNA CHAMBA.

       HONOR A QUIEN HONOR MERECE.

Tal vez no hay un ser más asombroso y admirable que el Maestro.

Simòn Bolívar en carta su maestro Simòn Rodrìguez:

".....Vd., Maestro mío, cuánto debe haberme contemplado de cerca aunque colocado a tan remota distancia. Con qué avidez habrá seguido Vd. mis pasos; estos pasos dirigidos muy anticipadamente por Vd. mismo. Vd. formó mi corazón para la libertad, para la justicia, para lo grande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero que Vd. me señaló. Vd. fue mi piloto aunque sentado sobre una de las playas de Europa...".

La experiencia de ser maestro se disfruta y se padece, se inventa y se reinventa, tiene dimensión de historicidad, pero también de futuro.  La labor del maestro  no es tan fácil  como muchos  creen pues esta  profesión   conlleva una responsabilidad  la cual debe ser asumida con profesionalismo, requiere sensibilidad, comprensión, tolerancia, paciencia,  para poder atender las necesidades de aprendizaje de los alumnos demandadas por el entorno social y cultural en el que se encuentran. No es un profesiòn para improvisados.



 

El maestro es  aquella persona con capacidades y habilidades,  que busca  no solo la enseñanza y aprendizaje de sus estudiantes, sino formar en ellos su capacidad de crítica y transformación. Ya lo dijo el maestro Luìs Beltràn Prieto. Un maestro no puede ser un eunuco polìtico. Un ser castrado por una ideologìa totalitaria, entregado al servicio de un partido o de un caudillo.




La huella.del maestro:
Quien en el mundo recuerda al menos un maestro o una maestra que le iluminò la vida, que le ayudó a descubrir sus talentos, que supo leer lo que venía escrito en su ser desde el comienzo y lo orientó a seguir una disciplina, escoger una profesión, abrazarse un destino. Quien no tuvo esa maestra o ese maestro en los primeros años le falta ese impulso vital que ayuda a encontrar el camino


Los verdaderos maestros son seres generosos y reveladores,  tienen unas características comunes, y quizá la principal es la capacidad de descubrir el talento de sus pupilos la facultad, de escuchar lo que verdaderamente dice el que habla, y descifrar, por las palabras o por los signos, la originalidad de un destino.. Los maestros marcan derroteros en la vida y su influencia es determinante en el futuro de los jòvenes.


Esa es la responsabilidad sagrada del maestro y esa es su mayor satisfacciòn y se encuentra con sus antiguos alumnos y le dicen tantas cosas bellas que justifican su paso por el magisterio..


Hay una sutil diferencia entre ser profesor y ser maestro. Ser profesor es transmitir a una clase ùtiles conocimientos en diversas materias. Ser maestro es comprender a cada uno en su sensibilidad, en su interioridad, en sus valores. El maestro o maestra tiene el don de llegar al alma de sus alumnos, los profesores enseñan ciencias o matemáticas, lengua o quìmica., pero los maestros tienen esa subjetiva facultad de llegar a cada uno para sacar lo mejor que hay oculto

El tìtulo da la idoneidad del maestro pero la vocaciòn hace la diferencia. Ahora pregunto en mi supina ingenuidad cuàl es la vocaciòn de un maestro expres, sin formaciòn, sin dones que repartir, cuyo ùnico interès es una chamba juvenil..Què huella puede dejar, como no sea el mal recuerdo que se tiene de aquellos pocos profesores "piratas".La responsabilidad es de un Estado que todo lo que toca lo prostituye, aùn las cosas màs nobles..


 El maestro merece el respeto y la justa remuneraciòn por su labor. no se puede educar con salarios de hambre.

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